Islamismo después de la Primavera Árabe: entre el Estado Islámico y el Estado-nación

IWR_201601_islamism_after_arab_spring_coverCinco años después del inicio de los levantamientos árabes, los principales grupos islamistas, que generalmente buscan operar dentro de los confines de la política institucional, se encuentran brutalmente reprimidos (Egipto), caídos del poder (Túnez), fracturados internamente (Jordania) o eclipsados ​​por grupos armados (Siria y Libia). Los movimientos inspirados en la Hermandad Musulmana y la Hermandad habían disfrutado de un considerable poder de permanencia, convirtiéndose en actores arraigados en sus respectivas sociedades, instalándose en estrategias de contienda democrática gradualista, centradas en la participación electoral y trabajando dentro de las estructuras estatales existentes. Sin embargo, las conmociones gemelas de la Primavera Árabe —el golpe de Egipto de 2013 y el surgimiento de ISIS— han desafiado los modelos islamistas dominantes de cambio político.





La primera sección del documento analiza cómo los desarrollos recientes en la región están forzando una discusión de las diversas líneas divisorias dentro de los movimientos islamistas en los países de mayoría musulmana. El segundo resalta los desafíos que enfrentan los partidos islamistas, que, una vez admitidos en los pasillos del poder, han tenido que hacer política en contextos circunscritos y hacer compromisos difíciles sin alienar a sus electores conservadores.



La tercera sección considera cómo los grupos islamistas han dado sentido al ascenso de ISIS a la prominencia. El cuarto analiza más de cerca los enfoques centrados en el estado de los movimientos vinculados a la Hermandad y cómo estos están siendo objeto de escrutinio o están siendo desafiados desde varios sectores, particularmente por activistas de base más jóvenes. El documento concluye considerando brevemente hasta qué punto los movimientos islamistas podrán ver más allá del Estado en los años (y décadas) venideros.



Marte es similar a la tierra