La historia y el futuro del Partido Laborista británico

La política británica se ha convertido en el centro de atención (nuevamente) a raíz del Brexit, la renuncia de la primera ministra Theresa May y las próximas elecciones de liderazgo del Partido Conservador. Un actor clave que se espera que influya en el futuro de la política británica es el Partido Laborista, que dirige Jeremy Corbyn desde septiembre de 2015.





El 14 de junio, el Centro de Brookings para los Estados Unidos y Europa (CUSE) recibió al historiador y periodista David Kogan, quien recientemente publicó Protesta y poder: la batalla por el Partido Laborista (Bloomsbury, 2019), una historia de la fiesta desde la década de 1970 hasta la actualidad. Kogan discutió algunos de los temas centrales de su libro, que pregunta si el laborismo es un partido de protesta o de poder. Profundizó en los factores detrás del reciente giro del partido hacia la izquierda y cómo este cambio afectará las perspectivas electorales del partido. Señaló que aunque Corbyn es euroescéptico, la división de su partido sobre el Brexit le ha impedido adoptar una postura definitiva sobre el tema. Además, Kogan postuló que los laboristas eventualmente tendrán que abordar la reacción violenta con respecto a los comentarios antisemitas de Corbyn. En términos generales, sugirió que el éxito futuro del laborismo depende en gran medida de su liderazgo y de cuán adecuadamente aborde las divisiones dentro del partido.



La charla de Kogan fue seguida por un panel de discusión con él y Amanda Sloat, Robert Bosch Senior Fellow en CUSE, y moderado por el director de CUSE, Thomas Wright. Los panelistas examinaron el impacto de Tony Blair en el laborismo y la posterior aparición del nuevo laborismo y Corbyn. Hicieron hincapié en que el laborismo ha tenido un desempeño deficiente en sus bastiones de transición (como Escocia), lo que ha generado dudas sobre las capacidades de liderazgo de Corbyn. Además, discutieron cómo Corbyn se compara con los posibles retadores tory, que podrían reemplazar a Corbyn en el futuro, y qué podría aprender el Partido Demócrata Estadounidense del giro a la izquierda de los laboristas.



Luego, el panel respondió preguntas de la audiencia.